Carolina Abriani tuvo la enfermedad en abril y decidió formar parte del grupo de donantes. Gracias a sus anticuerpos, se salvaron varias vidas. «No duele nada», dijo.
Un ejemplo de solaridad y de ponerse en el lugar del otro es el de Carolina Abriani, una joven mendocina que se recuperó de coronavirus y donó plasma cuatro veces
“Fui y me comentaron mas detalladamente para qué servía. Por suerte tenía anticuerpos, entonces podía donar. Luego me comunicaron que podía seguir donando ya que, cuando uno va a donar plasma, le sacan una bolsita con 600 ml. Esa misma sangre la separan, te sacan el plasma y el resto te lo devuelven», comentó.
Su recuperación fue en abril y, desde ese momento, decidió hacer algo para que el resto de la población también pueda curarse.
«Cuando fui por segunda vez, me dijeron que el plasma había sido efectivo y que habíamos salvado algunas vidas. Eso me entusiasmó. Ninguna vez me dolió y eso que tengo venas finitas y es más complicado hacerlo. Le pido a todos los recuperados que vayan a hacerse el estudio. No duele nada», expresó.
En Mendoza, seis personas ya recibieron plasma de 14 recuperados para tratar el coronavirus.