«Sangre y miel»: la versión de horror de Winnie the Pooh que llegó a los cines

Llegó de la mano de Terrorífico films, la primera distribuidora de cine de terror en Latinoamérica y es argentina. «Buscamos algo disfuncional», dijo uno de sus creadores.

Terrorífico Films es la primera distribuidora de cine especializada en terror de Latinoamérica que este jueves llegó a los cines nacionales con su segundo lanzamiento: la polémica «Winnie the Pooh: sangre y miel».

El film independiente se hizo cuando los derechos del personaje de Disney pasaron a dominio público y cuenta cómo Christopher Robin abandona a sus amigos en el bosque para ir a estudiar. Cuando regresa, se volvieron salvajes y buscarán matarlo.

«Empezamos a estrenar cine de terror que era un género por atrás de los grandes blockbusters que es redituable y muy buscado», contó a Pasen y Vean Mariano Gigaglia, parte de la distribuidora.

El primer gran éxito con el que nació Terrorífico fue Terrifier 2, la película que causó hasta «desmayos» en Estados Unidos con la historia de un payaso asesino que acecha a dos jóvenes.

«Hay también una pizca de humor en este tipo de películas. Mucha gente dice ‘ay, me voy a espantar y no es sólo eso. Muchos amantes del género gore -extremadamente sangriento- o slasher van al cine a pasarla bien, a reirse», describió y adelantó que ya negocian por traer versiones oscuras de Bambi, El Grinch, Alicia en el país de las maravillas, Peter Pan y más.

De todos modos, también apuestan a subgéneros más clásicos del terror como aquellos con posesiones, espíritus o monstruos.

El gran disparador muchas veces es el boca en boca en las redes sociales, contó Gigaglia, quien incluso confesó que su hijo de 15 años le sugirió fijarse en el payaso de Terrifier.

«Buscamos hacer algo disfuncional a lo que venían haciendo las diferentes distribuidoras, muchos de nuestros productos en otro momento no hubieran tenido la posibilidad de tener espacio», amplió.

Por otra parte, remarcó que buscan hacer participar a los fans del terror en sus propuestas en redes  (@terrorificofilms), ya que no sólo quieren «vender una película».

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