Funcionaba en Cullen al 3000. Este tipo de prácticas, además de eludir el marco legal que regula la actividad, abre interrogantes sobre los flujos económicos que circulan por fuera del sistema.
Un operativo llevado a cabo durante la madrugada del jueves en Cullen al 3000 , en Rosario, concluyó con la clausura de un casino clandestino y la detención de diez personas que se encontraron en el lugar.
La intervención se activó a partir de una llamada anónima al 911 , que alertó sobre una posible fiesta ilegal en ese domicilio.
Al arribar al sitio, agentes constataron la existencia de mesas de juego, fichas, dinero en efectivo y anotaciones relacionadas con transferencias, lo que permitió confirmar la realización de actividades de juego sin habilitación legal.
Según se informó, uno de los presentes admitió que allí se estaban llevando a cabo partidas de azar .
El procedimiento fue derivado al Ministerio Público de la Acusación (MPA), que ordenó el secuestro del material encontrado y el traslado de las personas involucradas a una dependencia policial para continuar con la investigación.
El caso pone nuevamente en evidencia la persistencia del juego clandestino en ámbitos urbanos, muchas veces encubierto en espacios privados, fuera del alcance del control institucional.
Este tipo de prácticas, además de eludir el marco legal que regula la actividad, abre interrogantes sobre los flujos económicos que circulan por fuera del sistema formal y los riesgos asociados a la falta de control estatal.
El uso de mecanismos de denuncia ciudadana, como el 911, demuestra ser una herramienta útil para visibilizar situaciones que, de otro modo, podrían mantenerse ocultas.