Fue denunciado por vecinos de barrio Cabildo. Ahora quedó bajo investigación judicial y administrativa.
En los últimos tiempos, la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA) ha quedado en el centro de diferentes episodios escandalosos.
En mayo, se conoció el apartamiento de un estrecho colaborador del jefe Adrián Salcedo, tras dar positivo en un examen toxicológico.
Días después, se secuestró marihuana en el techo de la base de la FPA en la ciudad de San Francisco. Se trata de un lugar estratégico para esa fuerza, ya que desde hace un tiempo se viene advirtiendo un crecimiento del movimiento narco en el este provincial, sobre todo en los lugares más próximos a Santa Fe.
En junio, un agente de 26 años se presentó en la unidad judicial 4 y denunció que el día anterior le habían robado 90 mil pesos en efectivo que él había guardado en un cofre de seguridad dentro de la base de la FPA, ubicada frente al Parque Sarmiento de la ciudad de Córdoba.
Y a comienzos de este mes, la jefa de la FPA en Villa María, Jésica Peña, y su pareja, el también policía Luciano Andrada, fueron condenados por integrar una organización dedicada a la producción y comercialización de estupefacientes.
Ahora, un oficial quedó demorado luego de que el viernes último a la noche disparara al aire con su arma reglamentaria para festejar el triunfo de Belgrano en el clásico versus Instituto, según se sospecha. El policía, de 42, fue denunciado por vecinos de calle Bernasconi al 2200, de barrio Cabildo, quienes lo acusaron de comenzar a disparar apenas terminó el partido.
Fue entonces que una comisión policial llegó al lugar y lo entrevistó. Dejaron asentado que tenía «halitosis alcohólica» y se avisó a la propia FPA. Además de una causa judicial que se abrió en la unidad judicial 3, también se dio participación al nuevo Tribunal de Conducta Policial, según trascendió a partir de diferentes fuentes, ya que a nivel oficial no hubo ninguna comunicación al respecto.
