«Barbie» y «Oppenheimer» protagonizan una guerra que no tiene perdedores

Multitudes llenarán las salas de cine para ver lo nuevo de Christopher Nolan y la historia de la muñeca más famosa con Margot Robbie y Ryan Gosling. Una supuesta «venganza» y más secretos detrás de una impactante movida de marketing.

Barbie y Oppenheimer. Incluso se inventó el término «Barbenheimmer». Las redes sociales pareciera que no hablan de otra cosa que del estreno simultáneo de estas dos películas bien diferentes entre sí: una renovada historia live-action de la muñeca más famosa y la vida del «padre» de la bomba atómica.

Todo empezó por una supuesta venganza. Christopher Nolan, que trabajaba desde hace años con Warner Bros., dejó el estudio después de atrasos en el estreno de Tenet en el medio de la pandemia y del lanzamiento de todas sus películas en HBO Max. Es así que llevó a Oppenheimer a Universal y muchos aseguran que en represalia, Warner decidió estrenar su tanque más grande del año el mismo día.

Esta versión difícil de comprobar hizo que se acrecentara sobre todo en las redes una rivalidad entre los dos films, que empezó con memes en las redes y terminó con los propios protagonistas de las películas hablando de eso.

Las redes sociales se inundan de comentarios previos a ambas películas

El propio Nolan aclaró que le parecía saludable el doble estreno: «Creo que para aquellos de nosotros que nos preocupamos por las películas, hemos estado esperando tener un mercado abarrotado nuevamente, y ahora pasa y eso es fantástico».

Cillian Murphy, quien protagonizó Peaky Blinders y ahora se pone en la piel de Robert Opphenheimer, confesó que irá a ver Barbie: «No puedo esperar para verla. Creo que es genial para la industria y para el público que tengamos dos películas increíbles de cineastas increíbles que se estrenarán el mismo día. Podría pasar un día entero en el cine, ¿qué es mejor que eso?»

La protagonista de Barbie, Margot Robbie, y Greta Gerwig, su directora («Mujercitas», «Lady Bird»), posaron con entradas de cine y el póster de Oppenheimer detrás, algo que incluso Tom Cruise -que estrenó Misión Imposible 7- hizo con las dos películas.

De qué trata cada una

Barbie -que arrasa con su efecto rosa en el mundo e incluso si lo googleamos la pantalla se pondrá de ese color- le pone por primera vez carne y hueso a la muñeca más famosa de la historia.

Margot Robbie se pone en la piel de la protagonista, que tiene una una vida perfecta en Barbieland. Sin embargo, cuando empieza a hacerse algunas preguntas que la incomodan, decidirá viajar hasta el mundo real. El guion lo escribió Gerwig junto a su esposo Noah Baumbach («Historia de un matrimonio) y Ryan Gosling interpreta al famoso Ken.

Oppenheimer, filmada en IMAX y con gran foco en la calidad de la imagen, se centra la historia del hombre que «debe arriesgarse a destruir el mundo para salvarlo». Cillian Murphy interpreta a Robert Oppenheimer, el físico estadounidense que lideró el proyecto para crear la bomba atómica, lo que representó fuertes cuestionamientos morales para él mismo, que terminaron afectando sus decisiones a futuro.

Emily Blunt, Matt Damon, Robert Downey Jr., Florence Pugh y Rami Malek son algunas de las impactantes figuras que forman parte del elenco.


Un duelo… ¿sin ganadores?

De las bromas se pasó en redes a conjugar los estilos de la película en creativos videos y planes de los fans del cine de pasarse al menos 5 horas en salas viendo ambas películas el día de su estreno.

Disfraces, colores y un marketing -espontáneo o no- que llegó a todas partes. Pese a que aquí todos son ganadores, todo indica que Barbie será la que se lleve todos los números.

La película con Margot Robbie está apuntada a un público mucho más amplio, que incluye a preadolescentes, jóvenes y adultos que conocen desde hace años a la muñeca. En cambio, la historia de Oppenheimer apunta a un público más adulto, afín a los dramas de Nolan en las que la historia y la temporalidad son un factor clave.

Según un relevamiento de The Hollywood Reporter, Barbie recaudaría en su primera semana de estreno en Estados Unidos entre 70 y 80 millones de dólares, mientras Oppenheimer llegaría a los 40 millones de dólares.  El presupuesto de esta última fue de 100 millones de dólares, mientras que el de la muñeca llegó a los 145 millones (cifras que se duplican o más si tenemos en cuenta la publicidad).

El duelo de estilos está servido y la mejor manera de participar es yendo a las salas.

FacebooktwitterFacebooktwitter