«Tenemos que entender que nuestros ríos cordobeses son amigables para nuestros turistas pero el riesgo son las crecidas repentinas que además son severas y rápidas. Por eso hay que estar atentos», sostuvo.
Sobre cómo funcionarán las alertas, sobre todo para aquellos turistas que acampan cerca de los ríos, contó: «Hay una zona de monitoreo todo el tiempo en la Dirección de Defensa Civil. Esto nos permite monitorear ríos, cuencas. Por protocolo se activan las Defensas Civiles locales con bomberos y policías y comienzan el patrullaje, en alguno lugares críticos hasta pusimos sirenas».
«Hay que concientizar que hay ríos amigables pero peligrosos», remarcó.
Vignetta contó que hay una constante capacitación para poder salvar vidas en caso de riesgo y que por eso «hay tranquilidad en la capacidad y habilidad de los profesionales destinados a esta tarea».
Tal es el caso del policía que el fin de semana pasado le salvó la vida a un hombre de Merlo que casi se ahoga en el río Cosquín, en el balneario La Toma, mientras pasaba el día con su familia.
